Los antiguos alumnos del Máster en Ingeniería Industrial de Tecnun, Borja Apaolaza, Naroa Coretti y Juncal Arbelaiz, escriben desde Boston, contando su experiencia en el MIT, una de las universidades más prestigiosas del mundo.

Juncal Arbelaiz, doctoranda en Matemáticas Aplicadas en el MIT, se encuentra en su tercer año de tesis, y explica que los “dos primeros, fueron intensos porque hay que aprobar un elevado número de asignaturas con requerimientos de nota, así como un examen oral de unas 2 horas de duración que dicta si uno puede seguir o no en el doctorado. Soy afortunada de poder decir que conseguí pasar esta fase del doctorado cumpliendo con todos los requerimientos, y considero que la formación que recibí en Tecnun jugó un papel importante en ello”.  La irunesa hace mención a instituciones que le han apoyado económicamente para poder realizar la tesis en Boston: primero lo hizo el MIT por medio de una Presidential Fellowship y  posteriormente la Caixa con su Beca de Posgrado.

Por si fuera poco, recientemente ha conseguido un Premio Nacional Fin de Carrera, una beca prestigiosa de Google en USA, y la beca de excelencia de la Fundación Rafael del Pino el mes pasado. Además, es parte del comité ejecutivo de Graduate Women at MIT (GWAMIT), desde donde tratan de fomentar el desarrollo profesional y personal de las mujeres de posgrado en el MIT. Los proyectos en los que trabaja, tal y como especifica la joven ingeniera, se ubican principalmente en la intersección entre la teoría de control y algoritmos de optimización, aplicados a sistemas dinámicos espacialmente distribuidos y de gran escala. 

Naroa Coretti, finalizó el Máster en Ingeniería Industrial, y se marchó a Boston en febrero, con la ilusión de “regresar con la mochila cargada de experiencias y de aprendizaje”. Antes de irse contaba que “esperaba volver con las mismas anécdotas que había tenido en Tecnun. porque el máster le había dado para muchas, y siempre habían gozado de un buenísimo ambiente”.

Las expectativas se han cumplido, ya que, tal y como describe, su experiencia americana está siendo “genial, porque cada día es una nueva aventura y eso hace que el ritmo de aprendizaje sea totalmente acelerado. Además, vengo todos los días con muchas ganas y con mil ideas en la cabeza”.

Naroa Coretti apunta que su investigación se centra en cómo se puede transformar los sistemas de bicicletas compartidas en una solución más atractiva y eficiente para el transporte en las ciudades. “En concreto, estoy trabajando en una bicicleta autónoma que se comportará como una bicicleta normal mientras está siendo utilizada, y conducirá de forma autónoma desde el punto en el que haya sido depositada, hasta el punto en el que se encuentre el siguiente usuario. El convertir las bicicletas compartidas en un sistema de movilidad bajo demanda, además de hacer su uso mucho más conveniente, resolvería el actual problema de redistribución con su consecuente coste económico y ecológico”, concluye Coretti desde el otro lado del charco.

Por su parte, el antiguo alumno Borja Apaolaza explica que ha participado, en el proyecto Changing Places. “He estudiado cómo interactuamos con los espacios en los que vivimos y cómo se puede hacer un uso más eficiente de ellos, dado que nos dirigimos a un futuro en el que las ciudades estarán densamente pobladas. Se espera que los espacios en los que vivimos disminuyan, y este es el motivo por el que en City Science se están investigando formas en las que, mediante arquitectura robótica y la sensorización, podamos conseguir vivir cómodamente en micro-apartamentos”, apunta Apaolaza.

En esta línea, hace unos años se formó en City Science la startup Ori Living, dirigida por el donostiarra y también antiguo alumno Hasier Larrea, que recientemente ha hecho pública una colaboración muy ambiciosa con la multinacional sueca IKEA, con una serie de productos que hacen este fin posible.