El Certamen de Relatos Breves organizado durante la cuarentena tiene ya sus ganadoras. La doctoranda de Tecnun Fátima Villa y el profesor David del Río, promotores de la iniciativa, aseguran que la decisión del jurado “fue difícil, porque ha habido mucha calidad en los textos recibidos”. Ambos agradecen a las personas participantes que hayan compartido sus reflexiones, así como a los patrocinadores del concurso, la papelería Tamayo y el centro de talasoterapia La Perla, por los premios que han entregado a las ganadoras.

Eva Sacristán González ha obtenido el primer puesto en la categoría de castellano, con su relato “Improrrogable”, e Irati Mendia García, doctoranda de Tecnun, ha alcanzado el primer puesto en la categoría de euskera con el relato “Bakardadea lagun artean”

El segundo premio de relatos en castellano lo ha conseguido el relato “Hay días”, escrito por la alumna de Tecnun Amaia Lizarraga Urzay (3º Ing. Tecn.Ind.), siendo Mireia Yurrita Semperena (Máster Ing.Ind) la segunda ganadora en la categoría de relatos en euskera, con su texto “Gabantxi”. El tercer premio en la categoría de castellano se lo ha llevado M. Luisa Santesteban Arizcun, y su reflexión titulada “Con la historia familiar bajo el brazo”. Las ganadoras recibirán un pase para la Perla y una pluma.

“Pensé escribir sobre lo que estábamos viviendo, pero desde un punto de vista diferente. La palabra ofrece esa fantástica y paradójica posibilidad: poder esconder lo insospechado bajo la apariencia de lo más evidente y esperable”, narra Eva Sacristán.

Irati Mendia, por su parte, reconoce haber echado en falta el mar y haber querido narrar su perspectiva desde ese punto de vista, “reforzando la relación entre lo humano y lo natural": "Al adentrarme en el mar noto que formo parte de la naturaleza, que es lo que he echado de menos en el confinamiento”.

La alumna de Tecnun Amaia Lizarraga confiesa que “suele escribir para exteriorizar y encauzar sus emociones de manera que le sea más fácil entender lo que siente y sus razones. “No solía dejar que nadie leyese lo que escribo, pero desde hace un tiempo un par de amigos lo hacen y me animaron a presentarme con este texto”, cuenta alegre tras recibir la noticia.

Por último, la alumna del Máster en Ingeniería Industrial Mireia Yurrita, escribió su relato desde Estados Unidos, ya que la crisis estalló cuando se encontraba haciendo una estancia en el MIT: “Escribir ayuda a poner orden y de manera bella todas las sensaciones y emociones que afloran al sobrellevar una situación tan delicada lejos de casa”.

• Recopilación de los relatos del certamen