Alberto Domingo, alumno de 2º curso de Ingeniería en la Universidad de Navarra, ha puesto en marcha MyMampara, una estructura con efecto mascarilla que permite que los consumidores puedan disfrutar con tranquilidad de sus ratos de ocio en las terrazas y al mismo tiempo, que el establecimiento aumente su aforo y sus condiciones de seguridad.

El joven malagueño afirma que “el PIB español se apoya en un 15% en el turismo y por ello, los hosteleros juegan un papel protagonista. Quiero ayudar a la gente”. Cuando le preguntamos por sus mamparas, lo tiene claro: “Es liviano, fácil de plegar, ocupa poco, es adaptable a cualquier espacio, incrementa el aforo de las terrazas y, además, es estético”.

En estos momentos, Alberto está buscando apoyos en los legisladores a través de los organismos competentes, quienes deciden las nuevas normas con las que restaurar poco a poco la normalidad. “Ya he presentado una solicitud de patente”, añade Alberto. “Me preocupa ver a los mayores con mascarillas bajo el sol con estas temperaturas. Para beber o comer te las tienes que quitar y los dos metros de distancia se me antojan poco eficaces. Quienes definen las normas de protección deberían tener esto en cuenta. Con estas mamparas, los aerosoles encontrarían obstáculos físicos, reduciendo el riesgo de contagio de los consumidores”.

En este video, Alberto nos enseña más de cerca cuál sería el resultado final a través de un render 3D:

 

Cuando le preguntamos por los datos, el alumno manifiesta que “está todo estudiado. El uso de las mamparas reduce la necesidad de distanciamiento, permitiendo pasar del 50% al 80% de ocupación, lo que supone un 60% más de beneficios para el negocio.

Además, el estudiante añade que “las marcas pueden incluir sus logos o publicidad en las mamparas como hacen actualmente en el mobiliario de terrazas y toldos. Por tanto, con la colaboración de los fabricantes de bebidas y con las habilidades del Ministerio de Turismo y Comercio a la hora de diseñar medidas inteligentes, el sector de la hostelería sin duda se recuperaría antes”.

Al final de la entrevista, Alberto sonríe con ese optimismo andaluz que le caracteriza y bromea “tenemos que recuperar la actividad social que nos hemos perdido en estos meses y para ello, qué mejor que tomarse unas cervecitas con los amigos y la familia”.